Análisis del fenómeno del incendio, de los efectos del fuego, y de la reacción y comportamiento de las personas ante incendio para facilitar el desplazamiento de los ocupantes del edificio hasta un espacio suficientemente seguro, en un tiempo determinado, con suficientes garantías en el desplazamiento.
Detección de las principales dificultades a las que se enfrenta el proyecto arquitectónico, las variables que deben tenerse en cuenta para si anticipar las soluciones en la fase de diseño, evitando que el conjunto no tenga que sufrir radicales retoques, postizos y superpuestos para resolver lo que no ha sido previsto de antemano.
Revisión en aquellos edificios existentes que deben ser rehabilitados para nuevos servicios, justificando cuales son los elementos indispensables para garantizar esos medios de seguridad.
Modelización, abaratando costes, analizando diferentes escenarios, detectando riesgos y explorando posibles soluciones.